Política
Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea han pedido a Muamar Gadafi que abandone el poder y han reconocido al opositor Consejo Nacional Libio (CNLT), con base en la ciudad de Benghazi, como "interlocutor político", tal y como reclamaban el Estado francés y Gran Bretaña.
Los líderes europeos han acordado también estudiar "todas las opciones necesarias" para evitar que las fuerzas de Gadafi ataquen a la población civil, según ha anunciado el presidente permanente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, al termino de la cumbre extraordinaria convocada para analizar la situación en Libia.
Las posibles opciones militares se activarán "si hay una necesidad demostrable, una base legal clara y apoyo de la región", ha detallado Van Rompuy. Los responsables de los ataques a la población civil, ha avisado, "tendrán que hacer frente a graves consecuencias".
Van Rompuy ha defendido que el CNLT es para la UE "un interlocutor fiable", ya que "no queremos tratar con Gadafi".
Ha reconocido que algunos de los dirigentes del Consejo son ex ministros destacados de Gadafi, pero ha mantenido que "tomaron una decisión valiente de dejar el régimen y tomar partido por la rebelión, incluso poniendo en riesgo sus vidas".
Por ello, cree que "es suficientemente fiable en este momento para tratar con él".
Los líderes europeos han acordado también estudiar "todas las opciones necesarias" para evitar que las fuerzas de Gadafi ataquen a la población civil, según ha anunciado el presidente permanente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, al termino de la cumbre extraordinaria convocada para analizar la situación en Libia.
Las posibles opciones militares se activarán "si hay una necesidad demostrable, una base legal clara y apoyo de la región", ha detallado Van Rompuy. Los responsables de los ataques a la población civil, ha avisado, "tendrán que hacer frente a graves consecuencias".
Van Rompuy ha defendido que el CNLT es para la UE "un interlocutor fiable", ya que "no queremos tratar con Gadafi".
Ha reconocido que algunos de los dirigentes del Consejo son ex ministros destacados de Gadafi, pero ha mantenido que "tomaron una decisión valiente de dejar el régimen y tomar partido por la rebelión, incluso poniendo en riesgo sus vidas".
Por ello, cree que "es suficientemente fiable en este momento para tratar con él".
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